• 1 – Antioxidantes
Ayudan a neutralizar los efectos negativos de los radicales libres sobre la piel. Hay un montón de frutas, verduras y otros alimentos que contienen antioxidantes. Además, en caso de que sea necesario, se puede tomar temporalmente y bajo prescripción dermatológica, suplementos de vitaminas y minerales y betacaroteno. También utilizar cosméticos específicos para cada tipo de piel y que contengan antioxidantes de eficacia tópica demostrada como los ya mencionados, vitamina C y E.
(A nosotros nos encanta esta crema de día, Keenwell Oxidance Antioxidant Multidefense SPF 15 Vit C + C)
• 2 – Ácidos grasos esenciales
Sus beneficios antiinflamatorios, no sólo en procesos dermatológicos, ayudarán a disminuir los efectos negativos de los excesos durante estos días. El ácido grado omega 3 se encuentra en pescados como el salmón, el aceite de linaza, de borraja o girasol y en los frutos secos.
• 3 – Limitar el consumo de grasas saturadas y azúcares
En una época en la que las comidas contundentes y los dulces navideños aparecen en nuestra mesa, lo ideal es comenzar el año con una dieta equilibrada rica en frutas y verduras. Apuesta por los cereales integrales, aceites vegetales, pescado rico en grasa, carbohidratos complejos de bajo índice glucémico y proteínas de origen animal.
• 4 – Utilizar fotoprotectores
No nos cansaremos de decirlo, cuidado con el sol. Proteger la piel con protectores solares también es necesario en invierno ya que continuamos expuestos a la radiación solar. Esto es aún más necesario cuando practicamos deportes de nieve donde la altura aumenta los efectos dañinos de los rayos del sol.
(La B*B Cream de Keenwell con base protectora SPF 20 es perfecta para proteger, hidratar y rejuvenecer tu piel.)
• 5 – Evitar el consumo de alcohol.
El alcohol deshidrata la piel y puede hacer que aparezca más roja, al destacar los capilares. Además, beber demasiado predispone a comer de forma compulsiva, nos hace ganar peso y nos da aspecto abotargado.
• 6 – Beber agua
Ingerir al menos dos litros de agua al día nos permite hidratar la piel, tanto desde el interior como desde el exterior. Una piel hidratada conserva su resistencia a las infecciones e irritaciones y mantiene su aspecto
elasticidad y luminosidad.
• 7 – No fumar
El tabaco y la piel son enemigos ya que reduce la elasticidad natural de la piel, provoca el envejecimiento prematuro y puede empeorar las enfermedades dermatológicas.
• 8 – Ser constante con las rutinas de limpieza e hidratación diaria
Tras un período de excesos, la piel se beneficiará de la renovación. La aplicación de cosméticos con productos queratolíticos a base de ácido retinoico o hidroxiácidos, o la aplicación de peeling superficiales o medios realizados por dermatólogos ayudarán a mejorar la salud cutánea.
(La fantástica crema TOTAL HYDRATING Cleansing Cremi-Gel de Anubis para tratamiento facial: Gel limpiador con textura en forma de crema-gel que permite una cómoda y suave aplicación. Limpia en profundidad y mantiene la piel en óptimo equilibrio.)
• 9 – Ejercicio moderado
Vuelve al gimnasio, sal a caminar, haz ejercicio en casa… Lo que sea, pero muévete. Márcate unos objetivos diarios e intenta cumplirlos. Por ejemplo, andar. Empieza con 5.000 pasos diarios, por ejemplo, y vete aumentando con el paso de los días,. Lo ideal es llegar a los 10.000, pero cada uno conoce sus límites, así que tampoco te obsesiones. Y para ayudarte, puedes utilizar una pulsera que monitoriza tus funciones. Esta de Xiaomi es estupenda.
• 10 – Recuperar los hábitos de descanso
“Lo importante es lo que se come, lo que se hace y lo que se aplica” dice el doctor Leandro Martínez. Y también es muy importante respetar los tiempos de descanso. Tu cuerpo lo necesita, y tu piel también. Dormir bien es fundamental, y por eso te proponemos este difusor de aceites esenciales.
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